Su figura es fácilmente reconocible, se trata de un cilindro, generalmente de color rojo, que lo identifica: es el extintor de fuego, el cual sirve para proyectar o expulsar un agente extinquidor que se dirige a un fuego, impulsado por la acción de una presión interna.
Hay de distintos tamaños y contenidos, pero todos los extintores tienen la misma función: tratar de apagar un incendio, y mejor, desde su inicio, para que sean extinguidos de forma breve, para que no se conviertan en fuegos grandes.
Es decir, un extintor se compone de un recipiente metálico que incluye una válvula que, al ser abierta, expulsa un compuesto químico, que es el extinguidor, por una manguera que se debe dirigir a la base del fuego.
Por cierto, mucha gente confunde ambos términos, pero es muy sencillo: Extintor es el cilindro, extinguidor es el polvo o substancia que se dirige al fuego para apagar un incendio.
¿Quieres saber más sobre el tema? Bueno, pues quédate en esta página para que conozcas. Por cierto, acuérdate de este principio: “Es mejor tenerlo y no usarlo, que necesitarlo y no tenerlo”.
Cuáles son los tipos de extintores:
El tipo de extintor es el primer factor que debes considerar al escoger tu equipo, ya que existen variantes en función del agente empleado para la extinción del fuego. Por ejemplo, los de agua resultan ideales para fuego de madera, pero no para fuego eléctrico.
También debes considerar el lugar en el que vayas a instalar el extintor. Por ejemplo, para una oficina o un hogar, lo más habitual es comprar un extintor de polvo o espuma. Estos modelos cubren todas las necesidades específicas de una vivienda. Sin embargo, para una cocina, lo más indicado sería uno especial para fuegos clase K.
Entonces verás que no existen de un solo tamaño, ni de una sola substancia extintora, pero vale la pena conocerlos para tenerlos en cualquier lugar en donde haya alguna probabilidad de que se encienda un fuego por un corto circuito, una chispa, una tormenta eléctrica, o por cualquier cosa que pueda generar un incendio.
La siguiente información te puede servir para conocer los tipos de extintores:
Extintores clase A: Son los más adecuados para fuegos causados por materiales combustibles sólidos o secos como madera, textiles, tejido, plástico, papel, cartón y ciertos tipos de cauchos. Su agente extinguidor es el agua o espuma que enfría, incluso, hay de polvo. Operan con presión permanente, con un depósito de bombeo o por reacción química, y son ideales para casa y oficina.
Extintores de clase B: Se usan para extinguir fuegos que se generan en líquidos inflamables y/o combustibles derivados del petróleo, como el aceite, el alcohol o la gasolina. Su agente extinguidor son los polvos químicos mezclados. Funcionan a través de presión interna desde el momento de llenado, o a través de presión externa, a través de un cilindro que expulsa polvos no tóxicos para el organismo, aunque en altas concentraciones pueden ser asfixiantes. También son ideales para casa y oficina.
Extintores de clase C: Estos son aptos para fuegos provocados por sustancias gaseosas como el butano, propano o gas natural. Contienen un agente extinguidor muy efectivo, pero su uso indebido puede perjudicar a la persona. Su agente extinguidor en este extinguidor es el agua, y entre sus propiedades está la conductividad eléctrica.
Extintores de clase D: Este es indispensable y efectivo en el combate de fuegos que se presentan en materiales reactivos, equipos eléctricos o metales combustibles como el sodio, magnesio o potasio. Suelen utilizarse sobre todo en ambientes industriales o profesionales.
Extintores de clase K: Son ideales para el fuego de aceites vegetales o grasas animales; contienen una solución acuosa de acetato de potasio. En contacto con el fuego, producen un efecto de saponificación, o crean una espuma, que enfría y aísla el combustible del oxígeno. Son ideales para cocinas domésticas e industriales.
Portátil o fijo, ¿cuál es el mejor extintor?
En cuanto a su posibilidad de portabilidad, básicamente hay de tres tipos: Portátiles, fijos y sobre ruedas.
Los extintores portátiles son aquellos que pueden transportarse por una persona, y pueden ser manuales o dorsales.
Los manuales pesan 20 kilos o menos. Los dorsales pesan entre 20 y 30 kilos; se cargan en la espalda y se usan frecuentemente en incendios forestales.
Los extintores fijos, son los que no requieren transportarse, se usan como instalaciones fijas de extinción, y disparan automáticamente al agente extintor.
Los extintores sobre ruedas pesan demasiado para ser transportados a mano, por eso incluyen ruedas para su desplazamiento.
¿Hay que darle mantenimiento a los extintores?
Para garantizar el buen funcionamiento del extintor se debe verificar regularmente su estado: comprobar la fecha de caducidad y seguir las recomendaciones y pausas de mantenimiento de los fabricantes. La vida útil de un extintor es de unos 20 años desde la fecha del primer timbrado (prueba que le hace el fabricante previo a su venta): los extintores se retimbran hasta tres veces.
Desde la compra o instalación de uno de estos equipos, el usuario o propietario debe tener conocimiento de las pruebas que se realizan, como estas:
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Trimestral: Cada 3 meses se debe revisar que no haya daño en los extintores y que sean adecuados para el riesgo que protegen. Hay que ver que sea fácil la extracción del soporte y que sean legibles sus instrucciones. Se debe controlar que el indicador del manómetro se encuentre en la zona verde, que tenga todas las partes precintadas (y que no estén dañadas), y la carga completa.
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Anual: Esta debe hacerla un profesional autorizado y calificado; debe comprobar la carga y la presión, así como el estado del agente extinguidor en el caso de extintores de polvo con botellín de presión. También debe revisar la presión de impulso del agente extintor y el estado de la manguera, seguro y válvulas.
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Quinquenal: Cada 5 años debe llevarse a cabo el retimbrado del extintor.
¿A qué altura se deben instalar los extintores?
El extintor debe verlo cualquier persona, a una altura visible y accesible, que no haya obstáculos para facilitar su manejo en caso de incendios. Hay que ponerlo en una pared vertical y, si se puede, cerca de los puntos de evacuación. Se debe colgar a una altura máxima de 1,70 metros del suelo y mínima de 10 cm.
¿A qué distancia deben estar los extintores?
Según la Norma Oficial Mexicana, los extintores de clase A, C y D deben estar a una distancia máxima de 23 metros.
Los de clase B, entre 10 y 15 metros (depende si el riesgo de incendio es alto o bajo).
Para los de clase K, tiene que ser de 10 metros.
En ocasiones, debido a la estructura de muchas instalaciones y viviendas, no se puede cumplir con esas distancias. Lo más seguro es que encuentres los extintores mucho más cerca, pero no hay problema, porque no es recomendable colocarlos a una mayor distancia, ya que sería riesgoso.